El presidente de la Nación, Mauricio Macri, y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, anunciaron este miércoles que finalizaron las obras del segundo emisario del Arroyo Vega, que duplicará la capacidad de drenaje y minimizará el riesgo de inundaciones.
«Emprendimos un camino sobre cimientos sólidos y hechos reales, como lo es este túnel», expresó Macri.
La obra, que se extiende a lo largo de 8,4 kilómetros desde el cruce de las calles Nueva York y Helguera hasta desembocar en el Río de La Plata, beneficiará a los vecinos de Núñez, Belgrano, Coghlan, Villa Urquiza, Colegiales, Villa Ortúzar, Villa Pueyrredón, Parque Chas, Agronomía, Chacarita, La Paternal, Villa del Parque y Villa Devoto.
Además, el presidente de la Nación indicó que «esto es lo que se está haciendo en todo el país», y agregó: «En cada lugar estamos llevando adelante estas transformaciones que necesitamos para poder crecer».
«Las grandes obras no se hacen de un día para el otro, y que cuesten y lleven más tiempo no significa que no las estemos haciendo», sostuvo.
En relación a eso, Macri argumentó que se puede «planificar un crecimiento sostenido a muchos años, estando cerca de los vecinos, con la verdad y en equipo».
Por último, el presidente de la Nación remarcó: «Estas obras demuestran que todo tiene una solución si hay trabajo, coherencia y honestidad».
En tanto, Rodríguez Larreta apuntó que “estos trabajos que no se ven son los que sientan las bases para que después se pueda avanzar en la transformación de la Ciudad”, y detalló: “Este túnel lo empezó a planificar Mauricio (Macri) en el marco del Plan Hidráulico, y es producto de un trabajo pensado seriamente y a largo plazo, porque las reformas estructurales llevan tiempo».
“Tenemos el orgullo de que el trabajo argentino pueda hacer obras del mejor nivel mundial”, manifestó el Jefe de Gobierno porteño, y destacó: «Ver que tantos vecinos van a poder dormir tranquilos y no se van a preocupar cuando llueve es una maravilla y una gran emoción».
De la actividad también participaron el vicejefe y ministro de Justicia y Seguridad porteño, Diego Santilli, y el ministro de Desarrollo Urbano y Transporte, Franco Moccia.
Moccia explicó que «estos trabajos van a implicar que casi 315.000 vecinos de la Ciudad ya no tengan más miedo cuando llueva», y ejemplificó: «En días, la famosa postal de los comerciantes de Cabildo y Blanco Encalada yendo a poner las compuertas va a pasar a la historia».
«Este túnel es un ejemplo de las obras que hay que hacer aunque no se vean, porque lo que tenemos que lograr es una Ciudad que esté preparada para el riesgo climático que tiene», completó el ministro porteño.
La capacidad de captación del emisario era insuficiente, por lo que la infraestructura existente no alcanzaba para contener los niveles de agua en los barrios de las comunas 12, 13 y 15. Ante esto, se trabajó para aumentar la capacidad del arroyo a través de este segundo emisario, en el que ahora se llevarán tareas de mantenimiento y limpieza.
La cuenca del Arroyo Vega se desarrolla dentro de los límites de la Ciudad en una superficie de 1.700 hectáreas. La obra tiene casi el 50% de la superficie del arroyo, de 17 kilómetros, y duplicará la capacidad de conducción del agua del emisario principal hacia el Río de La Plata.
Para poder llevar adelante este proyecto, se lo dividió en dos tramos: el primero cuenta con 5,9 kilómetros de extensión y para su construcción se utilizó la máquina tunelera “Elisa” (primera mujer egresada de Ingeniería de la UBA en 1918), de 5,30 metros de diámetro interno del túnel, la cual comenzó su excavación en la costanera Norte por debajo de la calle La Pampa hasta la intersección con la avenida Victorica. El segundo, en cambio, cuenta con 2,4 kilómetros con un diámetro interno de 2,30 metros, y se utilizó la técnica de excavación Pipe Jacking, que permite instalar tuberías sin realizar zanjeo. Este tramo abarca desde Nueva York-Helguera hasta La Pampa-Ballivian.
La máquina tunelera Elisa, que funcionó las 24 horas del día de lunes a sábado (los domingos se realizaron tareas de mantenimiento), trabajó a 20 metros bajo tierra (un edificio de siete pisos hacia abajo), avanzando 24 metros lineales diarios.
La cuenca del Arroyo Vega soportaba 48 milímetros de lluvia fuerte constante a lo largo de dos horas, pero con la construcción de este segundo emisario la capacidad aumentará hasta 81 milímetros, lo que reducirá el riesgo de inundaciones.
Para la construcción del túnel trabajaron 400 obreros y se emplearon 43.700 metros cúbicos de hormigón armado, lo que equivalen a 64 Obeliscos.
Tras la finalización de la obra, ahora se construirán 12 ramales secundarios asociados al arroyo, con una longitud aproximada de 10,5 kilómetros totales, para completar los trabajos estructurales destinados a mejorar la capacidad de captación del segundo emisario.
Además se harán sumideros en las calles Donado, Elcano, Victorica, Álvarez Thomas, Balbín, Constituyentes, Delgado, Freire, Lugones, Roseti, Sucre y Tronador.
Desde el 2015, el Plan Hidráulico se presenta como un conjunto de obras compuestas por medidas estructurales, programas y acciones para reducir el riesgo de inundaciones en la Ciudad. Éste es el mayor plan hidráulico desde 1869.
Las otras cuencas que componen al Plan Hidráulico son la Cuenca Maldonado, la Cuenca Arroyo Cildáñez, la Cuenca Larrazábal-Escalada, la Cuenca La Boca-Barracas y la Cuenca Radio Antiguo-Ugarteche.